Debéis ir a una casa escondida en un pequeño sótano, en la calle Luis Vives 6, en Madrid. No es un Palacio, pero tampoco es un antro… como al que vais a tomar copichuelas los fines de semana, ahí, pim pam trucu trucu. La puerta tiene un sutil tono “morado puñetazo” (se ve que el dueño quiere pasar desapercibido). Mínimo, el curioso propietario, que acaba de heredar la casa, será vuestro contacto, o será Bruno, el Mayordomo, espero que sea uno de ellos dos quien os atienda.